Las frustraciones surgen con la insatisfacción de un deseo. Son una respuesta ante ello.
Se viven con emociones como la ira, la ansiedad o un estado de vacío no saciado por ese deseo que esperas.
Se basan en altas expectativas que te has formado sobre algo o alguien.
Dependiendo de tu caso, puede significar que busques un ideal, evites una situación o te apasiones por el control.
Pero, más allá de esto, no es lo que ves fuera de ti, si no, lo que ocurre en tu interior;
es decir, en la forma en que afrontas un deseo no satisfecho.
Esa situación que ocurre y tu vivencia emocional, que suele ser creada según cómo la experimentes; pueden desencadenar una serie de adicciones. Esto no va de sustancias: se relaciona con las prácticas que afectan tu mundo interno y bienestar.
Frustraciones que has vivido y cómo se convirtieron en adicción
¿Alguna vez deseaste obtener algo y no lo lograste?
Existen un sin fin de situaciones que pueden producirte frustración:
*No lograr un objetivo personal o profesional,
*Esperar algo de alguien o de una situación
*Tus deseos de merecimiento y reconocimiento. Como querer que te reconozcan en tu profesión o familia),
*La inmediatitis, o el deseo compulsivo de que las cosas sucedan ya y la incapacidad de esperar,
*La rigidez e inflexibilidad
*El querer controlar lo que ocurre y las personas
*Y la incapacidad de adaptación a los cambios.
Y entonces, ¿cómo se relacionan las frustraciones con la adicción?
Una adicción es un hábito ligado a una conducta o consumo de algo. Es, en resumen, una afición, propensión o inclinación. Te invito a desmenuzar esa definición: un hábito es aquello que habitualmente practicas y una conducta es una manera de comportarse.
Ahora, recuerda un momento en que sentiste mucha frustración. ¿Qué hiciste? ¿Cuál o cuáles fueron las emociones que sentiste?
¿Ya lo habías vivido? ¿alguna vez volviste a repetir las mismas acciones y emociones? ¿de casualidad encuentras un patrón repetitivo entre ello?
Te daré algunos ejemplos: hay personas que sienten una profunda frustración porque no logran un objetivo y su forma de responder es enojarse con el mundo, con las circunstancias y realizar un listado de todas las cosas que salieron mal, agregando los responsables. ¿Logras observar el hábito y la conducta?
Una frustración adictiva es sostener la misma respuesta en el tiempo.
Paola Usma
Si reflexionas, te darás cuenta que puedes tener o haber tenido una especie de adicción al victimismo, a la crítica, al pesimismo, al control, al autocontrol desmesurado, a impedirte ser vulnerable, a desvanecerte ante cualquier situación, a fundirte en tus emociones o a vivir apegada a tu parte racional. Por supuesto: no es ni bueno ni malo. Simplemente es. Y si llega a ti es para ser experimentado, reconocido y obtener el balance que te permite vivir una vida de bienestar.
Desde esta perspectiva, cada persona responde de manera específica ante una frustración…y es probable que la repetición de dicha respuesta, le lleve a una adicción. Es decir, que la respuesta se convierte en un hábito o afición. Ahora reflexiona y toma consciencia de cuáles son esos hábitos y aficiones que sistemáticamente experimentas ante cualquier frustración.
¿Cómo salir del ciclo repetitivo de las frustraciones?
Observa la sensación de frustración como algo transitorio, de esta manera puedes revertirla y centrarte en tus capacidades para hacerlo
Practica la aceptación de lo que es, tal y como es. Tanto a nivel interno como externo
Siente durante un momento oportuno y reconoce que perpetuar esa emoción, solamente te drenará y al final, quedarás sin energía
Si tienes muchas emociones acumuladas, practica el journaling, exprésate en un lugar seguro, pon luz en tus creencias más rígidas o toma sesiones de coaching sistémico para salir del ciclo repetitivo
Verifica de qué formas las emociones se han alojado en tu cuerpo y muévelo con ejercicios y prácticas que suelten las tensiones
Libérate del apego a controlar las situaciones o personas
Libérate de permitir que los sucesos y emociones, te controlen
Enfócate en todo aquello que potencie tu bienestar y energía
Concede tu atención y tiempo a ser, a cultivarte y a tus objetivos personales
Ahora que sabes esto, ¿te atreves a liberarte de los hábitos y conductas adictivas?